sábado, 31 de julio de 2010
Una canción
de cielos aburridos
un vals de noviembre
un poema de abril
una herida que siente
que puede latir
y acallar las voces
que nacen de ti.
Una mirada
con dos ventanas de hielo
es la ventaja
de saber herir.
Canta risueño
un pájaro de hierro
el crujido del adiós
a tus pestañas les cuelga
color rosa un velo
y en el horizonte
se extingue la luz.
Es un vals del invierno
la gota que cae
sobre el jazmín
y tus labios lo besan
los míos te rezan
no me dejes aquí.
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